La evidencia es contundente: el 65% de los ingresos del diario más importante del mundo proviene de las suscripciones. Ya son siete años desde que el New York Times (NYT) decidió diversificar sus fuentes de ingresos: le apuntó a la fidelidad de sus lectores. Y le ha ido muy bien. Empezó restringiendo el número de noticias gratuitas por usuario: comenzó con 20 y luego pasó a 10; quienes querían leer 11 artículos o más, debían suscribirse. Hoy el caso del NYT sirve de inspiración para medios digitales alrededor del mundo. La historia de este medio la conoce muy bien Ismael Nafría, autor del libro La reinvención del New York Times, y la comparte, junto a otros aprendizajes, en su curso Cómo conseguir suscriptores o miembros para tu medio digital.
Los detalles de la exitosa estrategia del NYT y su historia permiten explorar ese camino que muchos periodistas emprendedores están dispuestos a recorrer. En uno de los módulos de la clase, Ismael no sólo menciona el caso del gran medio estadounidense sino también el de El Español, The Guardian y The Times. Cada uno tiene su particularidad y su modelo de pago. Sí, el paywall (muro de pago) no es la única opción. Hay otras igual de exitosas como las membresías, un paywall fuerte, o los beneficios extras a los suscriptores. Saber cuál es la mejor para cada medio es el reto, y como en el resto de historias de los periodistas emprendedores: no hay una fórmula mágica. Pero sí hay una serie de consejos prácticos que ayudan a recorrer ese camino, que Ismael —con 20 años de experiencia en periodismo digital— comparte, muy generoso, en su clase.
“He estudiado mucho los modelos de negocio de los medios porque es uno de los principales retos de futuro a los que se enfrentan, tanto los medios tradicionales que intentan adaptarse al mundo digital como los nuevos medios nativos digitales”, dice Ismael. Y agrega que la generación de ingresos procedentes de los usuarios es uno de los elementos clave en el futuro del modelo de negocio de los medios. “Analizar y explicar cómo lo están haciendo los que están más avanzados puede ser de gran ayuda para el resto”.
Los medios que se han aventurado a las suscripciones coinciden, al menos, en dos ideas: se han dado cuenta que la publicidad ya no es rentable como lo era 20 años atrás y que Facebook y Google son competidores muy difíciles; y confían en la calidad de su contenido, tanto, que saben que sus lectores están dispuestos a apoyarlos para que sigan produciendo. Un reporte de Reuters revela que cada vez hay más usuarios dispuestos a pagar por contenido, de la misma manera que lo hacen para escuchar música —Spotify, Apple Music— o ver películas —Netflix, Amazon Prime.
La corriente de suscripciones también está en nuestra región. En América Latina hay medios que han apostado por esta estrategia. La Diaria en Uruguay implementó el modelo hace 11 años lo llevó del papel a Internet. Recientemente, Nómada, de Guatemala, lanzó su campaña de suscripción y 14yMedio despidió el 2017 ofreciendo suscripciones; es el primer medio cubano en adoptar este modelo. La República, de Ecuador, ha colocado un botón de pagos con un mensaje que también invita a su público a apoyar al periodismo independiente, tal como lo hace Chequeado en Argentina.
El modelo está tan en voga en el mundo que en mayo de 2017 se creó el Membership Puzzle Project que, durante un año (termina en mayo de 2018) analizará diferentes programas de suscripción de medios digitales. “La membresía no va a funcionar si solamente es rogar por donaciones. Debe haber un contrato social entre los periodistas y los miembros. Saber qué debe contener ese contrato social es nuestro principal”, dice la descripción de este proyecto.
Los resultados, que serán publicados en 2018, ayudarán a descifrar quizás un poco más este terreno, aún inexplorado, que ya ha dado increíbles resultados a algunos medios digitales. Resultados que, de una manera didáctica y práctica, Ismael detalla en su clase, y pueden ser el impulso que faltaba para que más periodistas se aventuren a esta nueva fuente de ingresos, la suscripción.