¿Cómo es hacer periodismo feminista y LGTB+ en una de las provincias más conservadoras de la Argentina? Cuando nació en Tucumán el medio digital la Nota ese fue uno de sus principales desafíos. Pero este obstáculo se convirtió en una gran oportunidad: la de ocupar un nicho y hablarle a una audiencia que los grandes medios locales no tenían en cuenta, cubriendo temas de coyuntura desde una perspectiva de derechos humanos a la vez que intentaban imponer su propia agenda.
La Nota se propuso ir más allá de los temas tradicionales de la agenda feminista y logró transversalizar la mirada. A tres años de su creación conviven en el sitio artículos que dan cuenta de declaraciones del gobernador, información sobre Covid19, la crónica de una persona que reclama que se reconozca su identidad no binaria y notas sobre el debate del cupo laboral trans en la Legislatura provincial, entre tantas otras. Bajo la premisa de “no priorizar la primicia” apuestan por generar contenidos gratuitos de calidad y sostener una agenda propia sin eludir los temas de coyuntura.
El proyecto surgió en 2017 como parte de la Cooperativa de Trabajo Tropa Circa Ltda., dueña de una imprenta que funciona como principal soporte económico de la estructura periodística.
“No queríamos hacer un medio ‘alternativo’, sino entrar en el mercado y disputarle las audiencias a los grandes medios de comunicación de la provincia”, cuenta la periodista Milagro Mariona, quien dirige La Nota desde su creación.
Al comienzo una parte importante de los contenidos eran republicaciones de otros medios aliados como Marcha, Cosecha Roja, LatFem, La Tinta, Cítrica, Anred o El Gato y la Caja, entre otros. El auge del movimiento feminista en América Latina —y en Argentina en particular— les permitió encontrar rápidamente una audiencia fiel que fue creciendo poco a poco.
La cooperativa está conformada por 24 socios y socias. Son siete las personas —cinco mujeres y dos hombres— que se dividen las tareas periodísticas con las de la imprenta y reciben la misma remuneración por una jornada de tiempo completo. La gobernanza y la toma de decisiones es colectiva y cooperativa. Solo dos integrantes del equipo se dedican exclusivamente a la producción periodística. Una de ellas es Mariona, quien edita notas, reportea, gestiona pautas publicitarias y está a cargo de la construcción de redes y alianzas. El resto del equipo genera otros contenidos, cubre las publicaciones en redes sociales y atiende la página web. En promedio publican entre 8 y 10 notas diarias, de las cuales aproximadamente la mitad son de producción propia. Para ello cuentan con una red de colaboradores y colaboradoras habituales.
“Durante mucho tiempo el periodismo se ubicó bajo el manto de ‘la objetividad’ que no es otra que una subjetividad masculina, heterosexual y blanca que durante siglos dominó en los discursos mediáticos”, explica Mariona. Desde el comienzo La Nota fue pensado como un espacio en el que se intersecan las militancias con el trabajo periodístico. Hoy su directora editorial lo define como un “medio de comunicación con perspectiva de géneros y derechos humanos”.
En 2018, cuando el medio no había cumplido un año y aún intentaba posicionarse como un espacio de referencia dentro del ecosistema de medios feministas, el Congreso de la Nación discutió por primera vez en su historia un proyecto de interrupción legal del embarazo. El equipo debatió el rol que ocuparían a lo largo del debate: quedó claro que ante todo eran militantes y que desde ese lugar desarrollarían su tarea periodística.
“Al principio perdimos muchos lectores, pero no nos importó”, cuenta Mariona. A largo plazo, la apuesta funcionó: la experiencia militante previa de los y las integrantes del equipo y los vínculos con referentes les permitió llevar adelante una cobertura diferenciada, anclada en la discusión local y con el foco puesto en los grupos antiderechos, que redundó en un aumento de visitas en el sitio y de seguidores en redes sociales. El crecimiento se mantuvo de manera sostenida a lo largo de todo el 2018, pasando de 5 900 visitas en febrero a 22 600 en diciembre.
En 2019 tuvieron otro crecimiento vertiginoso en las visitas en los meses de noviembre y diciembre. La Nota fue uno de los medios que primero publicó la denuncia de abuso sexual contra el senador nacional y ex gobernador de Tucumán José Alperovich, uno de los hombres más poderosos de la política provincial en las últimas décadas.
En esa oportunidad el equilibrio entre periodismo y activismo volvió a ponerse en discusión. Mariona no solo ocupó un rol importante como directora de uno de los medios que acompañó la denuncia: también se convirtió en vocera de la denunciante.
“Fue difícil separar el rol de periodista del rol de vocera. Había días en los que tenía que brindar entrevistas y no podía escribir en mi propio medio. Debía decidir si priorizaba la causa o mi propio trabajo”, cuenta Mariona.
Esta tensión afectó la cobertura periodística pero les permitió imponer una mirada y “marcarle la cancha” a otros medios sobre cómo debían tratar la noticia. “Desde las redes de periodistas dijimos: acá no se va a publicar el nombre de la denunciante ni se va a investigar su vida privada”, contó. También lograron que los medios se refirieran a ella como “denunciante” y no como víctima, tal como planteó desde el comienzo el equipo de comunicación que la acompañó.
Durante los dos meses que duró la cobertura de la denuncia el promedio de visitas mensuales de La Nota pasó de 36 375 a 86 550. También tuvieron algunas dificultades: al poco tiempo de la primera publicación el sitio recibió una serie de ataques cibernéticos que lo dejó fuera de funcionamiento durante más de una semana.
A tres años de la creación del medio, la imprenta sigue siendo la principal fuente de financiamiento del sitio, aunque ya no es la única. A lo largo de 2020, en el contexto de pandemia se abrieron tres nuevas fuentes de ingreso que les permitieron empezar a desarrollar una estructura menos dependiente de los ingresos de la imprenta y reinvertir fondos para seguir apostando al crecimiento del medio.
Después de varios años de trámites y reclamos consiguieron pauta publicitaria oficial de los gobiernos nacional y provincial. Muchas de las denuncias que publican y acompañan desde el medio —fundamentalmente en casos de abuso o acoso sexual— tienen como destinatarios a personas vinculadas al poder político de la provincia. “Sabemos que corremos riesgo de que en algún momento nos la quiten, pero no por eso hemos dejado de denunciar”, dice Mariona. Hasta hace algunos meses recibían una pauta de la Extensión Universitaria de la Universidad Nacional de Tucumán.
El medio también es beneficiario del Salario Social Complementario, un subsidio estatal como parte de un programa permanente de apoyo a las cooperativas que fue reforzado durante la pandemia.
El tercer financiamiento que consiguieron es el grant de Google News Initiative como un fondo de emergencia por el Covid19. La mayor parte de este dinero fue invertido en el desarrollo de un estudio y en la compra de equipos para la grabación de podcast y en el armado de un espacio para talleres y conferencias.
La creación de una productora de podcast es la gran apuesta para 2021. Ya lo habían intentado antes pero la falta de infraestructura y equipos clausuró el proceso.
“De a poco queremos ir construyendo un medio multiplataforma”, cuenta Mariona.
También esperan poder impartir talleres de periodismo feminista que ayuden a capacitar a colegas de la región y, a la vez, abran una nueva fuente de financiamiento.
Las oportunidades de negocios para La Nota son amplias: al consolidarse como un medio de calidad informativa que impulsa una agenda de temas de género y LGTB+ en una sociedad tan conservadora, la apuesta por consolidar una audiencia cada vez mayor y más fiel se presenta como un objetivo realizable en el corto o mediano plazo.
La comunidad de La Nota está conformada en un 60% por mujeres y un 40% de varones de entre 25 y 60 años. La mayoría del tráfico en internet proviene de la provincia de Tucumán. Este dato demuestra la importancia de seguir generando contenidos hiperlocales. Otra pequeña parte de la audiencia proviene de provincias como Córdoba o la ciudad de Buenos Aires.
En 2020 el sitio tuvo un promedio de 51 000 visitas mensuales. En Facebook tienen más de 4 000 seguidores y es la principal fuente de tráfico, aunque cada vez es mayor el número que ingresa a través de Google. “En promedio, un 45% entra directamente desde los buscadores”, cuenta Mariona. Si alguien busca hoy en Google las palabras “Alperovich, Tucumán y denuncia”, por ejemplo, La Nota aparece en la primera página de resultados.
En Twitter la comunidad aún es pequeña. De todos modos mantienen actualizada la cuenta y replican tanto ahí como en Facebook todos los contenidos del sitio. En Instagram tienen casi 4 000 seguidores: ahí publican contenidos diseñados exclusivamente para esta red social.
El medio también tiene cuentas de Youtube, en la que publican los videos que acompañan los artículos y realizan charlas y conversatorios en vivo, y otra de Spotify, donde planean alojar los podcasts que comenzarán a producir a partir de 2021.
Entre las deudas pendientes, la directora editorial cree que todavía deben desarrollar aún más el trabajo territorial del medio. Fundamentalmente en los barrios populares de la provincia, donde si bien han logrado tejer redes con militantes sociales y feministas, todavía les cuesta llegar. También creen que es fundamental poder desarrollar y potenciar las redes con medios y organizaciones de diferentes provincias del país.
Mariona tiene una lista de objetivos para el corto y mediano plazo. En primer lugar está la de poner en marcha la productora de podcast para empezar a producir contenidos en nuevos formatos. Por otra parte, también apuntan a fortalecer la audiencia, que viene en constante crecimiento desde el nacimiento del sitio y a buscar nuevos modelos de negocios que incluyan a la comunidad. Una posibilidad sería la de pensar en un futuro un modelo de membresía o suscripciones. Para ejecutar todos estos planes creen que será necesario ampliar el equipo que se dedica exclusivamente al sitio web.
Además están pensando, en el mediano plazo, en el rediseño del sitio y la migración a un servidor propio que les permita una mayor independencia y efectividad en la resolución de problemas técnicos.